viernes, 24 de junio de 2011

LAS UVAS DE LA IRA


Hace dos días estuve viendo en DVD la película "Las uvas de la ira", basada en la novela de igual título de John Steinbeck, el libro que más me gustó de los que comentamos hasta ahora en el club de lectura.
Rodada en 1940, poco después de la publicación de la novela, se ha convertido hoy en un clásico del cine, protagonizada por un joven Henry Fonda y dirigida por John Ford.
Comienza,al igual que la novela, con Tom Joad camino de su casa tras salir de prisión.
El árido paisaje de Oklahoma, el fuerte viento levantando tormentas de polvo, las miserables casas de los campesinos, son retratadas fielmente en la película, con mayor realismo si cabe al ser en blanco y negro.
La película es muy fiel a la novela, aunque la calificaría de versión "light". No muestra los momentos de verdadera desesperación de los Joad y otras familias que comparten con ellos el campamento; los personajes siempre están limpios; los niños son preciosos y no se ven famélicos...
También se ha suavizado mucho el contenido revolucionario de la novela de Steinbeck, los discursos y reflexiones de los personajes sobre la necesidad de un cambio social, incluso mediante la violencia. El final es mucho más optimista que en el libro, con el discurso esperanzador de la madre "no nos destruirán, seguiremos adelante"...
Todo ello hemos de ponerlo en relación con el contexto, con el tiempo en que se rodó la película, que de haber sido de otro modo seguramente no hubiera pasado la censura.
Para todos los que habéis leído el libro, os recomiendo verla, y a los que no, puede ser una manera de acercarse a la obra de Steinbeck.

lunes, 13 de junio de 2011

REUNIÓN DEL MES DE JUNIO


El sábado once de Junio nos reunimos en la biblioteca para comentar “Una palabra tuya”, de Elvira Lindo.
El libro ha sido una sorpresa para todos nosotros, que no conocíamos de esta autora más que sus obras para niños de “Manolito Gafotas”.
Rosario, la protagonista, vive en un barrio de Madrid, ronda la treintena y trabaja como barrendera, y nos va narrando la historia de su amiga y compañera de trabajo, Milagros, desde su encuentro casual tras muchos años sin verse (habían sido compañeras de colegio), hasta el desenlace final cuando regresan al pueblo de Milagros.
Rosario, en una especie de diálogo consigo misma, nos cuenta todo lo sucedido en aquéllos días a la vez que nos desnuda su alma y sus pensamientos más íntimos, en un relato directo y crudo, sin ambages ni rodeos, que por momentos resulta descorazonador. Es una mujer sola, atrapada por la enfermedad de su madre, que utiliza a las pocas personas que se le acercan. A Milagros, cuya lealtad no valora por entender que se trata de una fidelidad “perruna”, a Morsa, al que convierte en su amante esporádico y clandestino por temor al que dirán , y al que usa temporalmente como un objeto, mientras encuentra algo mejor.
He de reconocer que me costó leerlo de seguido, pues la forma de afrontar la vida de Rosario y su visión tremendamente negativa del mundo me hacía tener que dejarlo a menudo…
Pese a ello es un libro recomendable, una bonita aunque triste historia contada de un modo sorprendente y un cierto tono de sarcástico humor.